El desprecio de Peña Nieto para con la Corte
Las expectativas eran altas en vísperas de que el presidente Enrique Peña Nieto enviara al Senado las ternas para cubrir dos vacantes en la Suprema Corte de Justicia. Pero todo se derrumbó cuando las propuestas presidenciales fueron de bajo perfil. Se agravó hasta la indignación cuando propuso una terna de mujeres con dos de ellas ignorantes e incompetentes, un insulto para el género –que tiene mujeres altamente calificadas para el cargo– y para los mexicanos.
Fue claro el desprecio para con la Corte, que resalta la indolencia presidencial. Una vez más, delegar decisiones cruciales para el país lo colocaron como si fuera enemigo de la mayoría de los mexicanos. Otra vez, la cúpula en el poder que lo tiene cercado lo volvió a lastimar.